Fotografía: Malabarista Lunar
Alcoy y Bañeres se convierten en estos días en cita para la fiesta. Cristianos y sarracenos ya están preparados para el inmortal combate. San Jorge, santo caballero, dirimirá la contienda. Y ustedes, espectadores de excepción. ¿Se apuntan?
Las calles de estas dos localidades alicantinas sufrirán una transformación casi mágica. Como si de la máquina del tiempo se tratase, parecerá que estamos en plena Edad Media. En Alcoy, las huestes enemigas de Al-Azraq, llamado así por sus ojos azules, se enfrentarán a un grupo de caballeros cristianos procedentes de Játiva. La batalla será decisiva gracias a la intervención de San Jorge, patrón de la localidad.
Los dos contendientes mostrarán sus ‘armas’ al pueblo. Será un desfile que durará, al menos un día. Cristianos e impíos, con la primera Diana, se pasearán por el pueblo, unos por la mañana, otros por la tarde. Y coincidiendo con el 23 de abril, festividad de San Jorge, llegará las procesiones de La Reliquia (traslado de las reliquias del santo hasta la iglesia de Santa María), y La General (desfiles multitudinario que el fuego pirotécnico). Al día siguiente, la apoteosis: kilos y kilos de pólvora para recrear la batalla de arcabucería, la lectura de ‘Las Embajadas’ y la aparición estelar de ‘San Jordiet’, un querubín (cada año, se sortea quién lo interpretará, entre los parroquianos), bajado desde las almenas del castillo, con la misión de lanzar las simbólicas flechas de la victoria cristiana.
Fotografía: Malabarista Lunar
En Bañeres (Banyeres de Mariola, en valenciano), a los desfiles de moros y cristianos, le suceden el día de San Jorge, el concurso de cabos y escuadras, y por la tarde, las tradicionales ‘voltetas’ infantiles, para concluir con la procesión del santo por las calles del pueblo. Pero esto es solo el principio. El 24, será día de lucha enquistada. La Mahoma, un inmenso muñeco que representa a los rebeldes, colgará en la torre del castillo. Luego, tras la derrota mora, vendrá la conversión, que se rematará con el Día del Santo Cristo, entre disparos de arcabuces y nombramiento de los próximos capitanes para el año siguiente.
Las dos fiestas son de interés turístico nacional, e internacional (incluso han viajado al corazón de la gran manzana, eso sí con algunas ausencias destacadas…), y se las recomendamos al 100%.