No sé si os pasa lo mismo que a mí, pero cada vez que tengo que comprar un vuelo, se activa en mi cerebro el modo “estrés”. Entonces me paso días, a veces semanas, entrando en los mismos buscadores, diferentes días a distintas horas, y cuando el viaje da margen para ello, además probando diferentes fechas de salida y de llegada… todo para conseguir el precio más barato, la ganga con la que todos soñamos… ¡ay! qué dura es la vida del que viaja en clase económica…
Los norteamericanos, que son ellos muy dados a estudios y encuestas, han presentado un informe basado en un estudio sobre precios de vuelos durante el pasado mes de enero. Las conclusiones de este estudio vienen a decir lo que la lógica ya indicaba, que los peores días son los fines de semana, y que los mejores van en medio de la misma… ainsss… y que se gasten dinero en eso, ¡en fin!
Como en todas las decisiones de nuestra vida, en ésta también se impone el sentido común, que coincide con las recomendaciones de los expertos, a saber:
–Comprar los vuelos con antelación. El margen que algunos sugieren es de entre tres meses y quince días antes de la fecha del vuelo. Otros afinan más y dicen que el mejor momento es ocho semanas antes del viaje. En cualquier caso, comprar con antelación permite encontrar mejores ofertas dentro de los días y horarios que mejor se ajustan a nuestros deseos o necesidades.
–Evitar comprar los fines de semana. A partir del jueves por la noche, las aerolíneas empiezan a subir los precios – todo según los expertos consultados- y una vez pasado el fin de semana, concretamente el lunes por la noche, vuelven a bajarlos. Esto hace que según Rick Seaney, presidente ejecutivo de FareCompare.com, el martes sea el mejor día de la semana para comprar un vuelo.
Dicho esto, una servidora, que no es experta ni mucho menos, pero a la que le gusta viajar en avión como a la que más, se despide para ponerse a mirar vuelos baratos aprovechando que hoy es martes, no vaya a ser que Mr Seaney tenga razón… bon voyage amigos!