Después de haber dado una vueltecita por la Baixa, nos queda todavía una cosa muy hermosa que hacer. Ahora visitaremos la Baixa desde lo alto, entonces necesitaremos ir al Elevador de Santa Justa que hayamos en la homónima calle, muy cerquita de la Plaza del Rossio.
A este elevador, que es un verdadero ascensor, se lo conoce también con el nombre de Elevador do Carmo, porque sube hasta la Plaza do Carmo. Se distingue de los demás elevadores por ser el único configurado como ascensor urbano vertical.
Se construyó a inicios del siglo XX siguiendo el proyecto del ingeniero Raoul Mesnier du Ponsard.
Historias cuentan que el Ponsard haya sido alumno del creador de la Torre Eiffel de París, pero la verdad es que no se tienen noticias ciertas, aunque se piensa que haya aprendido las técnicas en Francia.
Mide 45 metros y su torre es de estilo neogótico, toda de hierro y decorada con filigranas que en cada nivel forman un dibujo diferente; inicialmente funcionaba a vapor, sólo más tarde se puso la energía eléctrica.
Sus dos cabinas interiores están revestidas con madera y pueden albergar cada una 24 personas.
Al último nivel se sube por las escaleras helicoidales, aquí encontramos una terraza panorámica desde donde podemos admirar la Baixa, el Castillo de San Jorge, la Plaza del Rossio y las ruinas de la Igreja do Carmo. En la terraza hay también una cafetería, y desde luego que desde estas alturas un café se necesita.
Aunque ahora ya no cumpla su función inicial y se use sólo para ver el panorama, yo creo que de verdad vale la pena. Así que terminamos la vuelta por la Baixa aquí en el elevador, y desde esta terraza les saludo mientras admiro la ciudad.
Vía | Wikipedia, mundocity.com
Más información | Parte 1, Parte 4