Viena siempre se ha caracterizado por ofrecernos una mezcla seductora de antigüedad y modernidad reunida en un solo lugar. Las cepas de Mozart o la música hip-hop coexisten en el corazón de una ciudad donde las pequeñas calles son transitadas por un gran número de turistas que alternan entre museos, bares y cafeterías.
Pasar la noche en Viena es la oportunidad perfecta para asistir al teatro, beber algunos tragos o tener una romántica caminata bajo el cielo estrellado. Los hoteles son propicios para este tipo de actividades, por lo que te presentamos algunas interesantes propuestas:
- Hotel Das Tyrol: se trata de un pequeño complejo muy acogedor, ubicado en el corazón de la ciudad (justo al lado del Barrio de los Museos). Las habitaciones no serán espaciosas pero sí confortables, decoradas con una serie de obras de arte contemporáneo.
- Hotel Imperial: situado junto a la sala de conciertos Musikverein y construido en 1869 como uno de los palacios de Würtemberg, el Hotel Imperial se caracteriza por mantener la esencia de su construcción y acabado intacto. En total hay 138 habitaciones con todos los servicios necesarios para disfrutar de una estancia de lujo. También hay una sala de conferencias con capacidad para 250 personas.
- Hotel Sacher: se trata de una de las instituciones más importantes en Viena, con pasillos repletos de obras de arte que son exhibidas para el deleite del público. El Hotel Sacher cuenta con 105 habitaciones, una cafetería, dos bares, y un restaurante.
- Le Méridien: ubicado en Ringstrasse (a pocos pasos de la Opera Estatal de Viena y el Palacio de Hofburg), Le Méridien es uno de los hoteles más lujosos de la ciudad, con una construcción de estilo contemporáneo y habitaciones equipadas con todas las comodidades necesarias, además de un gimnasio, un spa y un bar temático.