Fotografía: Wikipedia
Grecia siempre será un destino fascinante y encantador por donde se le vea, ya sea descansando en una sencilla franja de arena o explorando las antiguas reliquias que nos remontan al pasado de su historia.
Si piensas viajar a Grecia, te recomendamos iniciar tu recorrido por la mítica capital de Atenas, que tiene entre sus principales atractivos la famosa acrópolis que es punto de destino de miles de turistas durante todo el año.
Los centros urbanos de Grecia muestran el esplendor de su arquitectura más gloriosa y apreciada que pudo haber en el mundo. Así por ejemplo, tenemos el Partenón de Atenas y una serie de monumentos que nos recuerdan los cuentos más antiguos de la humanidad. Por la noche, el cielo estrellado de un país donde la historia pesa y se hace sentir a cada instante, se complementa a la perfección con las diferentes propuestas de restaurantes y bares hasta el amanecer.
Por otro lado, en la costa de Grecia podemos elegir entre Mykono o Santorini, dos lugares pintorescos que nos ofrecen un arcoíris de opciones paradisíacas con la compañía y calma del Mediterráneo. Pero si lo busca es una aventura más desafiante, entonces puede darse una vuelta por Kafalonia Amorgos, el terreno ideal para practicar senderismo en sus picos más altos, o caso contrario visitar los valles de Creta.
Por último, también es posible practicar un poco de turismo arqueológico por la zona de Grecia Continental, específicamente en Delfos, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad, donde se posa el conocido Monasterio ortodoxo griego de San Lucas.