Quizás no sea el período justo para ponerse a hablar de una playa, ¿pero qué más da? La verdad es que la playa de Gulpiyuri me ha sorprendido talmente tanto que tengo muchas ganas de hablar de ella.
La playa de Gulpiyuri se encuentra en Asturias, en el concejo de Llanes, entre la Punta Rociera y Castro Molina. El aspecto raro que la ha convertido en un Monumento Natural de la Red Regional de Espacios Naturales Protegidos es que ¡esta playa se encuentra lejos del mar! De hecho encontramos esta singular playa en la tierra adentro, a unos 100 metros de la línea costera, entre verdes prados agrícolas. ¿Se imaginan?
Aunque la playa sea pequeñita no le falta nada, arena fina, agua de mar y hasta mareas. El particular fenómeno natural se debe a la anterior presencia de una cueva de roca caliza, esta fue creada por el mar pero al final se hundió dejando un hueco circular. Es justo en el hueco que hoy se encuentra la playa, que se comunica subterráneamente con el mar, un regalo del Mar Cantábrico.
Aunque la profundidad del agua es muy baja y permite sólo remojarse tumbados, será bonito visitarla. Además que está muy bien conservada, quizás gracias a su aislamiento, de hecho es accesible sólo a pie desde la playa de San Antolín o desde Naves. Y es que las joyas deben quedar bien protegidas.