Coblenza es una ciudad alemana que se sitúa en la confluencia de los ríos Rin y Mosela. De hecho, su nombre deriva del latín confluente, que significa “confluencia”. Se conoce también como Koblenz, y se constituye como una localidad empapada de historia, tradiciones y los paisajes más bonitos y románticos de toda Alemania en una visita al Valle Medio del Rin, el cual fue declarado por la Unesco como Patrimonio Mundial en el año 2002.
Otro de los puntos turísticos de gran interés en la ciudad de Coblenza, es Florinskirche o mejor conocida como Iglesia de San Florín. Se trata de una bella parroquia situada en la plaza de nombre homónimo.
Se constituye como una de los sitios más concurridos por las personas, tanto turistas como lugareños, ya que se toma como un popular punto de encuentro en la ciudad, por lo que será muy sencillo dar con ella paseando por las calles de Coblenza.
La iglesia fue edificada entre los siglos XII y XIV, sobre una capilla muy añeja. Esto hace de la parroquia una de las más antiguas de toda la región. Su arquitectura posee una innegable influencia del estilo romano, cuenta con torres picudas de gran altura y el techo está fabricado en madera, sin dejar de mencionar que todo el establecimiento está inundado de historia en cada uno de sus rincones.
En primer lugar, la iglesia fue devastada en muchas de sus partes durante guerras civiles, por lo que sufrió una serie de modificaciones y restauraciones en el siglo XVIII, momento en el cual se trasformó un templo para el protestantismo.