Visita a La Basílica Santa Maria della Salute

20 febrero, 2010
Fotografía: Sonse

Fotografía: Sonse

Volvemos a Venecia para visitar otro de los maravillosos lugares de esta encantadora ciudad, La Basílica Santa María Della Salute. Un lugar con historia y leyenda que pasaremos a explicar a continuación, ya que no todo el encanto se basa siempre en el arte o la arquitectura, sino también en las historias que lo envuelven.

Cuenta la leyenda que durante los años 30 del siglo XVII, Venecia estaba en una situación fatal por una epidemia de peste debido a las aguas que corrían por los canales y que entonces no había los métodos de limpieza de los que podemos disfrutar hoy en día.

Viendo esta gran enfermedad que estaba asolando la población, el patriarca en aquel momento, Giovanni Tiepolo, prometió que ordenaría la construcción de una iglesia dedicada a la virgen santísima si esta conseguía acabar con la plaga. Y así fue, ese mismo año se erradicó la enfermedad de la ciudad y poco tiempo más tarde se empezó a construir la que hoy conocemos como Basílica de Santa María Della Salute, que tardó muchos años en ser finalizada y no se la consideró a tal hasta 1687.

Fotografía: Gaspa

Fotografía: Gaspa

En su exterior podremos ver unas magníficas cúpulas de grandes dimensiones que se ven en su total perfección desde el embarcadero situado en la conocida Plaza de San Marcos. Pero es en el interior donde reside todo el arte. Para empezar, podremos apreciar unas enormes columnas repartidas por una estructura octogonal.

Dedicado a la virgen que salvó a la ciudad de la peste, encontramos un excelso altar con una escultura de la virgen y el niño Jesús que representa a “La Salute”. Además, en su techo podemos apreciar el trabajo de uno de los más grandes, Tiziano, que pintó la Muerte de Abel, el Sacrificio de Abraham, y David y Goliat.

Además, en esta basílica se celebra cada 21 de noviembre la Festa della Madonna della Salute para rememorar el gran acto milagroso que realizó la virgen para eliminar la plaga de peste que asolaba la ciudad. Durante este día se hacen unas colas que hacen un camino entre esta basílica y la Plaza de San Marcos. Sin duda, visita obligada en una estancia en Venecia.