En la película de Vittorio de Sica (Stazione Termini).1953, un atribulado Montgomery Clift y su amante, Jennifer Jones, agotaban sus últimas horas juntos mientras, de fondo, se escuchaba el ruido incensante de los trenes. La Estación Termini sirvió, por unas semanas, como set de rodaje.
Desde que fue inaugurada, en 1951, la principal terminal de transportes por ferrocarril de la vieja Roma sigue en la brecha. Por ella pasan alrededor de 600.000 viajeros al día, unos 70 millones al año.
En estos años, la estación romana ha ido transformándose pero sin perder ni un ápice de su autenticidad. A pesar de las últimas reestructuraciones, sigue conservando un halo de romanticismo que tanto gusta a los turistas. La amplia marquesina de cemento de su fachada exterior, denominada ‘el dinosuario’, la convierte en un punto de referencia para visitar en Roma.
Su interior, está repleto de tiendas, restaurantes y andenes, (casi una treintena), que parten y proceden de distintas zonas del país y del extranjero. De ahí, en las conocidas como Linee Laziali,concretamente desde la plataforma 24, tiene posibilidad, además, de enlazar con el aeropuerto de Fiumicino, el más frecuentado de Roma, mediante el ‘Leonardo Express’, un servicio de cercanías que le dejará en unos treinta minutos. El precio del billete ronda los 9,50 euros por trayecto.
El nombre de Termini está relacionado con las Termas de Diocleciano, ubicadas no muy lejos, y en un principio fue cedida al Vaticano (la villa originaria donde se asentó pertenecían a un Cardenal). Situada en pleno corazón romano, los alrededores de la estación están repletos de infinidad de restaurantes y hoteles, en su mayoría de negocios.
En la plaza situada delante, se encuentra la famosísima Lampara Osram, donde se dan cita propios y extraños. Lugar de encuentro para iniciar su paseo por la ciudad del amor.
Más información | Estación Termini (Horarios, tarifas…) y Wikipedia