SEGURIDAD SANITARIA EN VIAJES

24 septiembre, 2014
vacunas

Fotografía de Steven Depolo

Viajar conlleva riesgos, y debemos asumirlos. Hay mil cosas que se pueden torcer mientras estamos lejos del hogar. Por eso es importante hacer los deberes antes de salir.

Hoy voy a concentrarme en la seguridad sanitaria, que muchas veces tratamos con bastante negligencia. ¿Quién no se ha ido alguna vez de viaje por Europa sin llevarse consigo, o incluso sin tener la Tarjeta Sanitaria Europea? Yo más de una vez. Menos mal que nunca ha pasado nada. (En la web de la Seguridad Social se encuentra toda la información necesaria sobre la TSE)

No está de más recordar la conveniencia de contratar un seguro médico de viaje que cubra cualquier eventualidad. Esto es especialmente recomendable cuando se viaja a EEUU (donde las costas médicas son desorbitadas) o a países de los llamados en vías de desarrollo.

Mención aparte merece el capítulo “vacunas”. Si bien es su uso es obligatorio para entrar en algunos países, la recomendación del Ministerio de Sanidad, que podemos leer en su página web, es: “La selección de las vacunas para un viaje determinado dependerá de la situación sanitaria concreta del país a visitar, de las enfermedades endémicas que le afecten, de las características del viaje (no se corren los mismos riesgos en un viaje de aventura que en uno organizado y no es lo mismo un viaje a una zona rural que a una zona urbana), de la duración del mismo, de la situación general de salud del propio viajero y del tiempo disponible antes del viaje.” La misma página ofrece además información sobre centros de vacunación internacional así como mapas que marcan en rojo los países para los que es recomendable vacunarse.

Si a todo eso añadimos un poco de sentido común (evitando alimentos de origen y/o limpieza sospechosos y bebidas que no estén envasadas, llevando siempre con nosotros un botiquín personalizado, evitando riesgos innecesarios, etc), lo más probable es que disfrutemos de nuestro viaje sin mayores contratiempos.