Si no os atrevéis a cruzar las cascadas del Niágara, quizás os atreváis a comer al lado de una cascada en las Filipinas.
¿Y cómo es eso? Pues simple, esta es la oferta ofrecida por Villa Escudero, un restaurante situado en una plantación de coco y caña de azúcar que desde 1981 también puede ser visitada por los turistas, pudiendo así comer y cenar en un entorno muy original.
Clima tropical, jardines naturales y, sobre todo, la cascada que cae directamente a pocos metros de las mesas del restaurante, con el vapor de agua y la atmósfera que se crea y que se convierten en los ingredientes principales. Una estancia recomendada por muchos turistas, para vivirlo en primera persona.
Villa Escudero se encuentra a tan sólo una decena de kilómetros de la capital, St. Paul, en la provincia de Laguna. También existe la oportunidad de visitar las 800 hectáreas que conforman este paraíso natural, su museo de arte colonial (uno de los más grandes del país), así como presenciar las danzas típicas de las Filipinas, practicar actividades educativas y deportivas (también en el lago), visitar la aldea rural a bordo de un taxi colectivo y practicar la observación de aves (hay de muchos tipos).
Y queriendo también podéis dormir ahí, así que no os falta de nada.
Sitio oficial | villaescudero.com
Guía de viaje | Filipinas