Turín es la ciudad del diablo por antonomasia y junto con Lyon y Praga forma el así conocido como “triángulo de la magia blanca”. Aunque también es verdad que junto con San Francisco y Londres forma el “triángulo de la magia negra”.
Turín, ciudad de misterios, donde incluso los alrededores no son diferentes, como lo demuestra el “caso” del misterioso Monte Musinè, un antiguo volcán extinguido hace miles de años, lleno de galerías y pasajes irregulares en gran parte inexplorados, donde se dice que viven los alienígenas y parece ser que hay apareciones de ovnis.
Estamos en el Val di Susa, en la zona de Rivoli y de los Lagos de Avigliana, donde se filmaron algunas escenas exteriores de “El nombre de la rosa”. Un lugar lleno de leyendas, como la que ve a Herodes, rey de Judea, condenado a expiar sus crímenes aquí, encerrado en un carro de fuego. Además que aquí está lleno de representaciones solares, menhires y grandes piedras, como el monolito trapezoidal perfectamente cuadrado en el que se pueden distinguir tres soles.
Aunque, quizás, el episodio más importante remonta al 3 de marzo de 1996, cuando dos excursionistas afirmaron de haber visto un objeto brillante con forma circular y con reflejos verdes y amarillos revolotear por el cielo durante más de un cuarto de hora, noticia que apareció en muchos periódicos.
Pero por estas partes se habla también de cuevas encantadas como la del mago Merlín, hombres lobo, gritos inexplicables que resuenan en la noche, fuegos mágicos e imágenes espectrales… Y es que estamos hablando del monte más misterioso de Italia…
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