Bram Stoker es el creador de Drácula y a cien años de su muerte está bien hacer un tour para recordarle y para visitar los lugares más famosos del sanguinario vampiro, que parece que está más vivo que nunca…
El escritor irlandés, nacido en Clontarf (un área residencial de clase media al norte de la ciudad de Dublín, famosa por la batalla de 1014) el 8 de noviembre de 1847, falleció en Londres el 20 de abril de 1912.
La inspiración para el famoso personaje de Drácula con el que se hizo famoso en todo el mundo, le llegó gracias a un encuentro, que tuvo lugar en 1890, con el profesor húngaro Arminius Vambéry, fue este último quien le dijo acerca de la leyenda del príncipe rumano Vlad Tepes Dracul, transfigurado luego por Stoker en el Conte Drácula. El escritor tardó siete años para desarrollar el libro, después de cuidadosos estudios sobre la cultura y la religión en los Balcanes, así como la figura histórica del Conde Vlad Tepes.
Para quien nutre una pasión particular por el horror, o para quien simplemente tiene curiosidad de ver los lugares donde vivió el personaje que más tarde se convirtió en el Conde Drácula, la región de Transilvania en Rumanía, está dispuesta a darle la bienvenida a la aventura, también para celebrar el centenario de la muerte de Bram Stoker.
Se inicia desde la “pequeña París”, es decir, Bucarest, y se llega a Sighisoara, apodada “La Perla de Transilvania”, una encantadora ciudad medieval que se convirtió en uno de los monumentos del Patrimonio Mundial de la Humanidad. Según la leyenda, el lugar de nacimiento Drácula: donde una estatua es testimonio de su presencia, conmemorando el famoso “rey de los vampiros”. Se visita la Casa Vlad Dracul, en la que vivió entre los años 1431-1435, antes de convertirse en príncipe de Valaquia.
Otro sitio relacionado con Vlad está cerca de Brasov, una ciudad con un pintoresco aspecto medieval, donde se encuentra el Castillo de Bran que, en realidad, es sólo una de las casas del príncipe, la que utilizaba para cazar. Este es uno de los castillos más pintorescos de Rumanía, un imponente edificio que parece brotar de la roca y, en los días de niebla, adquiere una especial sombrío.
Imperdible el Monasterio de Snagov, situado en una isla del lago de Snagov, en cuyo interior se encontró una tumba donde se cree que Drácula fue enterrado, y la pintoresca Sibiu, Capital Europea de la Cultura en 2007.
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