Todos recordaréis a Heidi, esa niñita tan simpática y traviesa que vivía en una casa de madera en los Alpes de Suiza con su abuelito. Pues debéis saber que esa casa, encima a la montaña, que tan habituados estábamos a ver, fue inspirada por una casa verdadera que se encuentra en el pueblo de Mainfeld, en los mismos Alpes Suizos.
El pueblo de Heidi en Maienfeld sumerge a los visitantes de todo el mundo en la génesis de la historia para niños. Desde la comuna suiza de Maienfeld es posible emprender una ruta específica para llegar hasta la casa del personaje creado por Johanna Spyri.
La casa de Heidi es una casa rústica del 1880 accesible a los visitantes amantes del cuento. La casa muestra en una auténtica forma la despensa, la sala de estar con los personajes del cuento con las medidas reales, la sala donde se puede ver Heidi y también se puede interactuar con objetos y libros. Además, aloja hasta 6 personas que duermen en la paja y cocinan sobre el fuego, al igual que en los tiempos de Heidi.
Después de observar el interior de la casa se puede ver una fuente, “la fuente de Heidi”, hecha en 1953 por el artista Hans-Walt Koller, que representa a la pastora que le invita a un trago de agua.
Cerca de la casa hay un punto de encuentro con un pequeño restaurante y una tienda, los excursionistas más aventureros pueden continuar hasta Alphoi, la pradera alpina del abuelo de Heidi. Además, los productos lácteos frescos como el queso, la mantequilla y la leche se pueden comprar directamente de los montañeros.
Y para terminar nuestra visita a la casa de Heidi qué hay mejor que llevarse un recuerdo para casa en forma de souvenir. Los souvenirs originales de Heidi están a la venta en la tienda de la aldea. ¡Abuelito dime tú…!