Milán, se sabe, es la ciudad de los tranvías, un medio muy ecológico que está bien para desplazarse por esta caótica ciudad. Y es que en Milán los tranvías los ves por todas partes, aunque el que más me gusta es el “tranvía de las felicidades”, un tranvía que hacen para navidades, todo lleno de bombillas iluminadas que se va por la ciudad dando las felicitaciones a las personas; seguramente les hará mucha ilusión si logran verlo.
Otra manera de unir desplazamientos e ilusión, o bien en este caso la “comida”, es el tranvía ATMosfera, un tranvía restaurante que permite vivir una esperienza única en el local más exclusivo que se mueve por la ciudad.
El tranvía cuenta con dos vagones, ATMosfera1 y ATMosfera2, que son en su totalmente un restaurante para los amigos del gusto retró. Curado en los mínimos detalles ofrece platos a base de carne, pescado y para vegetarianos, cocinados por chefs de fama internacional y enriquecidos con algún plato típico de la tradición milanesa. Mientras que el viernes y el sábado es posible degustar platos típicos regionales italianos, acompañados por vinos seleccionados del territorio nacional y presentados por espertos del sector.
Una idea genial para unir el placer de la mesa al turismo, al descubrimiento de la ciudad, o quizás para una cena romántica, mientras Milán se ilumina bajo la pálida luz de la luna.
Web Oficial | atm-mi.it
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