El el sur de Etiopía encontramos la tribu africana de los Hamer, uno de los pueblos más tradicionales del país caracaterizados por sus elaborados peinados y por la decoración de su cuerpo, especialmente con pintados, que refleja el estatus social de cada individuo.
Entre las muchas tradiciones encontramos la Ceremonia del Salto de los Toros, que un poco recuerda el culto al toro de Grecia que podemos ver en el fresco del Palacio de Cnosos, en Creta. El salto de los toros representa uno de los eventos más significativos e importantes de la cultura de los Hamer, además que un evento importante para todas las comunidades de las cercanías.
Se trata de la iniciación masculina a la edad adulta y para esta ocasión tan especial los jóvenes Hamer deben demostrar fuerza y coraje saltando con agilidad sobre el dorso de 7 toros, dispuesto el uno al lado del otro. Deben subir sobre el dorso del toro y bajar bien 4 veces sin caerse nunca. Solo así se podrá decir de haber superado la prueba y el naala se volverá en daala, osea un verdadero hombre.
Se trata de un rito particularmente largo y complicado que dura hasta la puesta del sol y que está acompañado por otra serie de eventos y rituales.
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