A propósito de tiburones

22 junio, 2011

No sé a ustedes, pero a mí después de haber visto tantas pelis de tiburones cuando me meto en el agua me entra siempre un poco de miedo y voy por ahí inspeccionando la zona.

Aunque hay gente mucho más valiente que yo y los tiburones les encantan, es así que se van a visitar lugares como Shark Bay (el parque natural australiano que presenta más de 10 mil morsas en peligro de extinción y que está todo repletito de tiburones), o a bucear en las Bahamas (donde además de los tiburones encuentran cantidad de barcos hundidos); otros prefieren nadar en medio de los tiburones en una piscina y los menos atrevidos prefieren verlos desde afuera (como sucede cada año para Navidades en el Acuario de Cattolica, donde colocan un pesebre en el agua con los tiburones y los peces).

Y es que de estos animales en verdad no sabemos mucho. Por ejemplo, ¿lo sabían que existen los tiburones nadadores? Pues sí. Se trata del tiburón blanco, un animal que no obstante su grande peso es capaz de saltar afuera del agua por unos tres metros para agarrar a su presa.

Otro espectáculo de tiburones pueden verlo en las aguas de México, en la Península de Yucatán, donde se reúnen cantidad de tiburones ballena (los tiburones y peces más grandes del mundo), como sucedió en 2009 que se reunieron más de 420 tiburones. ¡Vaya miedo!