Nos hallamos en el sur de México, en el estado de Oaxaca (pronunciado oajaca), el quinto más grande del país ya que ocupa el 4,8% de su superficie total, 600 km de este vasto territorio son de costa que se asoma directamente sobre el Océano Pacífico.
Este es el corazón pulsante de la cultura india, donde encontramos más de 16 grupos étnicos que hablan muchos idiomas, componiendo así una riqueza multicultural y de tradiciones por conservar, bien evidenciada en los diferentes trajes, cada uno con colores y formas distintas.
La capital del estado es Oaxaca de Juárez, una ciudad construida alrededor de su plaza principal, cuyo casco histórico, junto al Monte Albán (perteneciente a una zona arqueológica), fueron declarados “Patrimonio Cultural de la Humanidad” en 1987.
El estado de Oaxaca y su capital son muy populares entre los turistas que suelen alcanzar la destinación desde Ciudad de México.
Visiten sus muchos monumentos e iglesias, den una vuelta por el mercado de La Merced, al descubrimiento de olores y sabores. Conozcan sus muchas tradiciones, como el Día de los muertos, el Viernes de Llano, el Viernes de Samaritana, la Noche de rábanos y la Guelaguetza, la fiesta principal de la capital.
Pueden darle de baile o echarse un chapuzón en una de sus maravillosas playas, por ejemplo en la playa que encuentran en el pequeño poblado de Zipolite, la playa nudista más famosa de toda México, genial también para los surfistas.