En el anterior artículo hemos hablado del Año Nuevo Chino, una fiesta que está ya a las puertas, envuelta por tradiciones y leyendas que la vuelven tan atractiva y que cada año moviliza millones de personas que viajan a sus lugares de origen para estar con sus familiares.
¿Pero qué fiesta es sin comida? Y es que la gastronomía cubre un papel importante durante los festejos del Año Nuevo Chino. Y no se crean que se coma simplemente la típica cocina que sirven en los restaurantes que todos conocemos, ni mucho menos, también en esta temática encontramos muchas tradiciones y supersticiones…
Entre los platos típicos que abundan en las mesas de los chinos encontramos los raviolis (jiaozi), sobre todo para la cena de noche vieja. También los dulces tienen un papel muy importante, especialmente al inicio del Año Nuevo Chino, en cuanto aseguran un “año dulce”.
Siempre el primer día del Año Nuevo Chino no comen carne porque se creen que así se aseguran una vida larga y feliz. Algunos hacen alguna excepción y se comen un pescado entero, cosa que representa la convivencia y la abundancia; mientras otros se comen un pollo con la cabeza y los pies intactos, porque simboliza la prosperidad.
Otra extraña tradición, la última que veremos en esta ocasión, es la de comer fideos en un tazón, pero sin cortarlos, para que la vida sea larga y no corta. ¡Bueno, vayan con los espaguetis por si acaso!
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