Como si de la película Los Cazafantasmas se tratase, un intrépido grupo de parapsicólogos planea un viaje desde Nueva York con el fin de atrapar las voces de las víctimas del legendario naufragio del Titanic, acontecido en 1912.
El investigador y experto sobre el hundimiento del crucero, William Brower, afirma que es probable que puedan recoger muchas evidencias, ya que, según su hipótesis, los lugares donde han fallecido un número alto de personas son proclives a generar estos misteriosos sonidos.
Un requisito imprescindible para emprender la marcha es reunir los casi 100.000 $ que se necesitan. Un objetivo que esperan les resultará más sencillo gracias a la incorporación al equipo de un obispo de Kentucky, y de un familiar (de ocupación escritor) de un tripulante muerto en el accidente.
Sin embargo, el área donde se produjo el naufragio tiende a ser un nido de tormentas. Si el clima no lo aconseja, el equipo pospondrá su viaje hasta el verano.
Una vez finalizada la misión, se esparcirán más de 1500 rosas blancas sobre el océano y una placa conmemorativa se sumergirá cerca del trasatlántico.
Fuente | La Información
Foto | cliff1066™