La Princes Street es la calle principal de Edimburgo y justo aquí, en los jardines, se encuentra un monumento muy particular, el monumento a Walter Scott, que aunque no lo parezca su interior es muy espectral, puesto que está lleno de escaleras muy estrechas y pasajes muy angustos y claustrofóbicos. El monumento mide 61 metros y es visible desde cualquier parte de la ciudad, seguramente se debe visitar si van a Edimburgo.
Por fin les hablamos del último edificio más espectral del mundo, bueno no el último pero sí el último que trataremos aquí en esta ocasión. Esta vez se trata de un albergue de Canadá, situado al número 75 de la Nicholas Street, en el centro de Ottawa. El Ottawa Jail Hostel es uno de los tantos albergues situados donde precedentemente había una cárcel, la Carleton County Gaol.
¡Quién sabe que no haya también algún espíritu criminal que se pasea por los pasillos, quizás por el pasillo de la muerte, donde venían condenados los criminales antes de ser ajusticiados en el patíbulo!
La prisión fue adquirida en 1972 por la Hostelling International, que aunque hizo restauraciones mantuvo gran parte de la estructura intacta, por eso desde afuera podemos ver que se trata de una casa muy vieja. Aquí podréis dormir en las celdas donde dormían los peores delinquentes de la ciudad, mientras que en la parte superior, que una vez tenía la función del brazo de la muerte, ahora se organizan excursiones diarias. Y como si no bastara, ¡muchos juran de haber oído los gritos del fantasma de Patrick James Whelan, condenado a muerte por homicidio hace más de 100 años!
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