La creatividad al servicio del sufrido consumidor. Si hace unos días os hablábamos del invento de unos rusos para amenizar los retrasos en el aeropuerto. Hoy os traemos otro invento de lo más práctico.
Al diseñador Erik de Nijs seguramente se le encendió la bombilla una noche que tuvo que pasar en el aeropuerto por culpa de un retraso de última hora.
Se le ocurrió aplicar el concepto de sinergia al campo de las maletas. Con una maleta sola no hacemos nada pero, ¿y si usamos todas al mismo tiempo?
Ideó una línea de cucas maletas llamadas Suite Case que unidas entre sí forman un sofá (aunque en la foto parece cómodo, eso hay que probarlo primero) en el que apoltronarse y matar el tiempo.
Desde luego, para los niños me parece una herramienta ideal para dormir a pierna suelta. Sin embargo, los adultos necesitamos más que una maletas tapizadas a lo retro para que la espalda no se resienta.
Ya sólo les falta que alguna de las maletas disponga de conexión WiFi o bluetooth. Tiempo al tiempo.
Fuente | Mundo Chica