Fotografía: Wikipedia
La Noche de Brujas es una festividad muy querida en los Estados Unidos y todos los años se realizan muchísimas actividades en diferentes ciudades por todo el país. Pero no quedan dudas de que una de las propuestas más espectaculares para los viajeros es el New York’s Village Halloween Parade. Se trata de un desfile de disfraces que sólo puede recibir un calificativo: espectacular.
Este evento surgió en los primeros años de la década de 1970 y se ganó rápidamente la popularidad que posee hoy en día. El desfile comienza en la Sexta Avenida, y todos los participantes se desplazan desde allí la Calle 21. Son varias cuadras donde se pueden observar a los personajes más desopilantes de la ciudad.
Todos los años son más de 50 mil las personas disfrazadas que participan del desfile, y tantas otras más son las que observan desde el costado de la calle. Además, el evento es transmitido en directo por la televisión para más de dos millones de espectadores.
Fotografía: Wikipedia
Cualquier persona disfrazada puede participar del desfile, sin importar la edad o el género. Muchas personas incluso disfrazan a sus mascotas (en su mayoría perros) para que paseen junto a ellos durante la celebración. Y si hablamos de disfraces, se pueden encontrar con caracterizaciones de músicos, personajes de películas, criaturas de terror, superhéroes o lo que se les pueda ocurrir. Al finalizar el desfile se realizan diferentes concursos, siendo el más importante el del disfraz más original de la noche.
La verdad que es un evento espectacular para divertirse durante la noche del 31 de octubre en Nueva York. Lo único que hay que tener en cuenta es que es necesario tomar ciertos recaudos para movilizarse, ya que la aglomeración de personas es tan importante que en ciertos lugares es casi imposible de caminar.
Si desean llegar hasta la Sexta Avenida y la Calle Spring (donde inicia la procesión) tomando el metro, no desciendan en la estación West 4 porque es imposible salir de allí por la gran cantidad de personas en el lugar. Lo más recomendable es descender antes o después y llegar hasta el lugar caminando.