Fotografía: Amaianos
Costa de la Muerte (o Costa da Morte) en gallego, es, paradójicamente, uno de los lugares más bellos del norte español, pero ha ganado más popularidad por su trágica historia que por las bellas playas y paisajes que la conforman. Este lugar es un histórico sitio de naufragios, lo que hace que la majestuosidad del sitio esté empapada por el lúgubre rigor de ser el causante de la muerte de miles de valientes marineros.
Uno de los lugares más importantes de Costa da Morte es el Cabo Vilán, ubicado en el municipio de Camariñas y declarado Lugar de Interés Nacional, que además de poseer uno de los entornos paisajísticos más imponentes, es el hogar del primer faro eléctrico que se instaló en España, luego del naufragio y la muerte de más de 170 marinos ingleses muy cerca de este sector.
Es de vital importancia poseer una cámara fotográfica al visitar Cabo Vilán, ya que los puntos panorámicos del lugar son majestuosos y conforman uno de los atractivos turísticos más importantes del lugar. Pero ten mucho cuidado si te acercas a los acantilados, recuerda que es un lugar peligroso, donde el mar generalmente suele estar muy embravecido.
Fotografía: Amaianos
Las formaciones rocosas que se van erigiendo sobre el lugar son el hogar predilecto para una gran cantidad de aves que se pasean sobre él, en su mayoría gaviotas, y además es alucinante ver (y oír) las olas rompiendo contra las piedras puntiagudas que emergen del agua y que con los años han erosionado la costa dándole un aspecto único.
Costa da Morte es el lugar ideal para todos los amantes de la tranquilidad, y para los sentimentales que se emocionan por la quietud del lugar, tan distante del insoportable bullicio de las grandes ciudades. No te dejes amedrentar por el nombre del lugar, porque la visita a este lugar es una experiencia que vale la pena vivir.