Fotografía: por M. Angel Herrero
Viajar a otros lugares del mundo nos puede ocasionar mas de un problema, por el desconocimiento de las diferentes leyes que existen gracias a las costumbres y tradiciones de cada lugar. Se trata de leyes que se han quedado ancladas en el tiempo, bien por las tradiciones, bien por convicciones sociales o religiosas, aunque siendo válidas, no se suelen cumplir a rajatabla.
En la legislación de Florida, una de sus leyes recoge que una mujer soltera no tiene permiso para saltar en paracaídas en domingo.
Una de las normas más sorprendentes la encontramos en Memphis, Tennesse, dice que si una mujer conduce un coche, un hombre debe precederla agitando una bandera roja avisando al resto de conductores y viandantes de que ésta se aproxima.
En Singapur y en Tailandia está prohibida la venta y consumición de chicle y las multas por tirar uno usado al suelo pueden llegar a ser muy cuantiosas.
La legislación británica prohíbe sacar la cama por la ventana.
En Kentucky existe una ley que obliga a sus ciudadanos ha lavarse, como mínimo, una vez al año.
Es curioso y sorprendente saber que en Illinois, cuna política de Barack Obama, actual presidente de Estados Unidos, es ilegal hablar inglés, puesto que el idioma oficial es el americano.
Fotografía: por Dunechaser
Napoleón Bonaparte tiene también su pequeño apartado en esta lista de leyes insólitas. Viendo el poco respeto con el que le trataban algunos de sus compatriotas, el caudillo francés prohibió bautizar a los cerdos con su nombre, ley que se perpetúa hasta nuestros días en la legislación gala.
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