Hay una zona de Florida que podríamos considerar que se paró en el tiempo, Winter Park, una población basada en un entorno con multitud de lagos conectados entre sí que hacen de la ciudad un lugar perfecto para navegar y practicar deportes acuáticos, además de una calle principal donde se concentra la gran mayoría de la actividad.
En una localidad donde se cuenta con la mayor cantidad de metros cuadrados de parque o jardín por persona de todo el estado de Florida, en esta calle principal podemos encontrar los más importantes comercios, escuelas, museos, uno de los parques más reconocidos del estado y, como curiosidad, una gran cantidad de galerías de arte que hacen de esta ciudad un lugar marcado para los artistas y bohemios que buscan un lugar tranquilo donde darse a conocer.
Tuvo un inicio de descanso turístico para la gente de dinero llegada de Nueva Inglaterra. Esto sucedía en el siglo XIX y poco a poco se fue convirtiendo en una ciudad bien planificada que ha crecido y que cuenta con muchos edificios públicos sobretodo relacionados con el arte.
Calles empedradas acompañadas de árboles por todos lados y casas bajas como debe ser en cualquier ciudad de visión antigua, ha hecho que los turistas cada vez más se animen a viajar a Winter Park, lo que ha llamado la atención de algunas cadenas bien conocidas de restaurantes, aunque se ha conseguido que eso no altere al nivel de vida tranquilo y despreocupado de sus gentes.
De estilo europeo, cuenta con algunos atractivos hoteles que se llenan sobretodo durante las épocas de las festividades más importantes del lugar que, como no podía ser de otra manera, están relacionadas con el arte, el Festival Bach, de música y el Festival de Arte más generalista. Un buen lugar para disfrutar de la tranquilidad que se busca en algunos momentos pero sin abandonar las comodidades de la ciudad.