La oferta cultural de Holanda es una de las más completas de toda Europa. Los museos que se pueden encontrar sólo en su capital son suficientes para llenar de arte varios días de visita. Por eso es recomendable saber que será imposible conocerlo todo en un solo viaje y lo mejor es centrarse en los lugares más importantes.
Un lugar imposible de dejar de visitar es el Rijksmuseum, que es el museo nacional de Holanda y cuenta con el trabajo de varios pintores holandeses de diferentes épocas, destacando sobre todo el siglo XVII. Se considera que en este museo se concentra la colección más completa de arte holandés que se pueda encontrar en ese país.
Otro de los principales museos de Ámsterdam es el Stedelijkmuseum, que cuenta con varias piezas de arte moderno y contemporáneo. Aquí se pueden hallar trabajos invaluables de artistas holandeses de todos los tiempos.
No puede faltar en el recorrido un paseo por el Museo Van Gogh, lugar que es visitado por miles de personas cada día. Los recorridos están organizados en cinco periodos del artista para poder conocer sus obras de manera ordenada. Las piezas que se pueden encontrar en este lugar son finamente exquisitas. El trabajo de Van Gogh es conocido mundialmente y es por eso que la concurrencia es masiva a su museo. No se puede desperdiciar la oportunidad de ver su autorretrato.
Otro artista holandés mundialmente conocido es Rembrandt y no se puede dejar pasar la oportunidad de conocer su casa, donde hoy funciona un museo en su honor. Se trata de una vivienda donde habitó el pintor entre los años 1639 y 1659. Se trata del lugar donde tuvo sus mayores inspiraciones y desarrolló sus obras más conocidas.