Giovanni Bologna, más conocido como Giambologna fue un escultor francés que vivió en Italia donde dejó un legado de hermosas obras, entre las que destaca su colosal Apenino.
Esta singular escultura formó parte del proyecto encargado a Bernardo Buontalenti que consistía en la construcción de una villa en el terreno de Francisco de Médici. La Villa se llamó Partolino y en ella se diseñaron jardines y juegos que contaban con diversos mecanismos hidráulicos que trasladaban las aguas de la fuente del Apenino hasta las demás estancias de la villa.
El trabajo creador de Giambologna persiste en tres bocetos tridimensionales de terracota. El primero de ellos es un Dios Fluvial cuya figura reclinada ligeramente mide 30 x 39 centímetros y actualmente se encuentra en el Victoria and Albert Museum en Londres.
El segundo Apenino mide 33 x 51 centímetros y personifica a un Dios montañoso en virtud a la ubicación de la villa. La figura también se inclina ligeramente y aplasta un pez con la mano derecha. Actualmente lo tiene el Museo Bargello en Florencia, Italia.
Por último, el tercer boceto es también un Apenino que tiene la mano izquierda apoyada dando la sensación de pretender levantarse.
La villa Partolino fue adquirida por Paolo Demidoff, quien le puso su nombre en el siglo XIX y en el mes de agosto de 1981 fue comprada por la Provincia de Florencia donde actualmente se luce para deleite de sus visitantes.