Existe una opción para pasajeros que no tienen prisa, trenes especiales o con encanto que conjugan la cultura, la naturaleza y la gastronomía de las zonas por las que transitan.
Estos permiten realizar trayectos que se escapan de las rutas convencionales, mostándonos a su paso la cultura. También se puede viajar en los grandes expresos de lujo, al estilo de las grandes líneas europeas como el Orient Express que, como en el mejor de los hoteles, ofrecen suites, salas de ocio y toda una serie de servicios para recorrer zonas geográficas como la Cornisa Cantábrica o Andalucía por precios de hasta 3.500 euros. Tampoco faltan los tradicionales funiculares, que recorren parajes poco accesibles a los transportes más convencionales.
Las líneas culturales son aquéllas que tienen como referencia una época histórica determinada o lugares de indudable interés cultural. Su precio suele oscilar entre los 15 y 25 € , se realizan en un solo día, incluyendo visitas guiadas a la ciudad de destino, y espectáculos a bordo de los vagones.
Un ejemplo es el El tren medieval que une Madrid-Chamartín y Sigüenza, lleno de trovadores, juglares y princesas, y que, además, incluye una degustación de dulces durante el trayecto.
Los expresos de lujo son grandes hoteles que no escatiman en cuidados de sus viajeros. Uno de ellos es el transcantábrico, un hotel sobre raíles que recorre la Cornisa Cantábrica, descubriendo las maravillas paisajísticas, culturales y gastronómicas del norte de España durante ocho días. El viaje, por tanto, tiene como objetivo conocer el patrimonio cultural de Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco.
Más información| Transcantábrico , tren medieval