Un singular destino turístico por excelencia resulta ser la Isla de Jeju situada en Corea del Sur. Entre sus principales atractivos se encuentra la cascada de Jeongbang, ubicada cerca de Seogwipo que tiene una caída de 23 metros y es considerada una de las diez maravillas de la isla.
Jeju ocupa aproximadamente 1900 kilómetros resultando ser la provincia más pequeña de Corea del Sur. Tiene un clima subtropical que la hace más acogedora ante sus visitantes y es conocida como la isla de la inmortalidad debido a sus bellos paisajes y por contar con Reservas Naturales con más de 4500 especies vegetales, por lo que se le considera Reservas de Biósfera de la Unesco.
Tiene zonas harto concurridas, pero, lo mejor es contactar con albergues pequeños que permiten disfrutar de la paz que emana de este lugar de embrujo, apto para unas merecidas vacaciones o tal vez una realmente luna de miel. Todo esto ubicado cerca de la Capital, Seúl (una hora en avión).
Viajar es una experiencia básica para las personas. Es viajando que logramos comprender y entender las diferencias y las similitudes que tenemos los seres humanos y eso nos enriquece de una manera especial. Viajar a la isla de Jeju es viajar no sólo a un lugar paradisiaco, es también conocer algo fantástico. Tanto niños, como adultos deben conocer este sitio.