Namsan, un matrimonio entre la naturaleza y lo moderno en Seúl

12 julio, 2009
Fotografía: Yeowatzup

Fotografía: Yeowatzup

Desde que Taejo, el rey fundador de la dinastía Joseón nombrara como Capital de Corea a Seúl en 1934 y, en particular desde hace unos 30 años, Seúl no ha parado de crecer en infraestructura.

Entre rascacielos, crecimiento demográfico e industrial, la ciudad de Seúl comenzó a padecer una de las taras de las grandes urbes: Conflictos con la naturaleza. Es en este contexto que hace cuatro años las autoridades nombraron como ícono representativo al monte Namsan.

Esta montaña se halla rodeada de un ambiente boscoso y un conjunto de aldeas con nombre Nanchom. Es ideal para el esparcimiento y diseñada para ser un jardín botánico en donde temporalmente se realizan las festividades de flores y árboles venerados desde la antigüedad por los seulitas.

Fotografía: Gliuoo

Fotografía: Gliuoo

En la parte alta de la montaña se encuentra la Torre de Seúl o Torre N, construida a comienzo de los años sesenta para ser un centro de transmisiones televisivas y que en el 2005 fue remodelada y reabierta para hacerla un punto distintivo de la ciudad.

Está compuesta en todos sus niveles por un conjunto de centros recreativos, paisajes artificiales, centros culturales y un restaurante giratorio casi en el último nivel desde donde se puede obtener una excelente vista disfrutando de un buen platillo de la casa.

Este sencillo paisaje natural-cultural en el centro de la ciudad va más allá de los propósitos de marketear muy bien a la ciudad de Seúl como destino turístico. Namsan es, en pocas palabras, una armonía entre las atracciones naturales y las más vanguardistas.