Fotografía: maplemusketeer
Otra manera de preparar el oro verde de los Indios es el Mate Cocido, muy difundido en zonas rurales y en el Cono Sur de América, donde constituye el desayuno obligado.
Este tiene un sabor parecido al Mate pero es más suave y tiene las mismas propiedades estimulantes y nutricionales. Se prepara haciendo hervir yerba mate (molida o picada, unos 80 gramos por litro) y luego se añade agua fría para beberlo sin quemarse. Una variante es el mate cocido helado y batido al que se le puede añadir una rodaja de limón y que en verano resulta muy refrescante.
Fotografía: AV4TAr
Otras variantes son dulce (con azúcar u otro edulcorante) y/o con leche. La variante con leche tiene valores nutritivos muy altos, tanto que muchas madres del Sudamérica lo dan a sus hijos y hasta las escuelas argentinas lo servían con el pan para el desayuno. En las ciudades, en cambio, el Mate se toma como un simple té, mientras hay quien le añade jugo de naranja, de limón o café.
También los parisinos se toman su “Mathe”, así como en Siria (pero aquí cada uno tiene su propio vaso de vidrio), mientras los gauchos usan añadirle unas gotitas de ginebra y hay quien se lo prepara en un cuerno vacuno o bovino llamado guampa.
También existen bebidas gaseadas a base de Mate y hay quien lo comercializa bajo forma de cremas y geles o de pastillas para adelgazar que además bajan la tasa de colesterol malo.
Fotografía: jaxxon
Como mencionaba en la primera parte, han podido ver ustedes mismos que esta yerba cuenta con una grande tradición y que su uso está muy difundido y no sólo en el sur de América. Si se quedan conmigo el próximo post les reserva una sorpresa.
Vía| Wikipedia
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