La costa asturiana comprendida entre Gijón y Ribadesella es rica en hallazgos paleontológicos. Tanto es así que esta franja del Principado ha sido denominada como ‘La costa de los dinosaurios’, y es que se han localizado hasta nueve yacimientos de icnitas (huellas) de estos enormes reptiles que vivieron en la península hace millones de años, en zonas como Villaviciosa o Colunga. Precisamente aquí se halla uno de los museos más importantes de Europa dedicados al estudio de estos animales prehistóricos.
Más de 500 piezas fósiles forman parte de la colección del Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), que es considerada la más completa y extensa sobre huellas de dinosaurios del mundo, y en donde destaca, la huella más grande, de un dinosaurio terápodo (82 centímetros), entre otras muchas piezas de enorme valor científico.
Precisamente hace dos años, el Museo acogió una exposición con réplicas de algunos de los fósiles más sorprendentes como las de un minisauripidus (de tan sólo 3 centímetros), hallado en Corea o los dientes de un gigantosaurio, en Argentina.
El visitante tiene a su disposición, una vez que entra en el Museo, (por cierto, construído bajo la forma de una gran huella ‘sauria’), la posibilidad de conocer ‘al detalle’ como fue la vida en la tierra desde sus comienzos, hasta la aparición del ser humano. Como si entrara en las tripas de uno de estos animales, el edificio está estructurado bajo arcos de madera, a semejanza de los barcos escandinavos.
Réplicas de estos enormes reptiles, proyecciones de audiovisual y material bibliográfico están disponibles para todo aquel que ‘ose’ entrar en el ‘universo jurásico’, con posibilidad de pasear por sus jardines o disfrutar con diversas atracciones y juegos para niños. Perfecto para pasar un buen fin de semana.
Más info|Museo del Jurásico Asturias