Siguiendo con la ruta que ya inicié hace algunas semanas, ahora me apeo en tierras de Castilla donde se asientan camposantos dispersos en pueblos y aldeas, como en Alba (Palencia). Un pequeño cementerio casi familiar rodeado por una muralla de piedra tosca. Perdido entre montañas palentinas, posee una belleza muy peculiar.
En Segovia, algo más al sur, sorprende esta construcción de granito, en lo que fuera un cementerio judío, hoy en ruínas. Situado en la zona del recinto amurallado, donde quedaron confinados, durante el siglo XII y XIII, y cuyo eje principal fue la actual calle de Judería Vieja hasta la Puerta de San Andrés, las ruínas son una huella ineludible del importante peso de la comunidad judía, durante aquellos años.
Y completamos este recorrido, en Yuste (Cáceres). Infinitas lápidas donde reposan soldados alemanes que murieron en contienda. El cementerio alemán, como así se denomina, constituye una peculiaridad más de la tierra extremeña.
Más información | Monasterio de Yuste , Torre Blanca (Albarracín) y Cementerio Judío (Segovia)